Florentino Pérez y la falta de valores del periodismo

Como mañana habiendo todo un Panathinaikos - Real Madrid de basket en Euroliga me niego en rotundo a escribir sobre el tema de la portada de hoy de Marca que ha obligado a Florentino Pérez a salir a la palestra para desmentirlo rotundamente, quisiera ahora escribir unas líneas para criticar, con toda la fuerza que este humilde blog me deja, a un periódico deportivo que por vender unos periódicos más, es capaz de tirar casi por la borda en un día la mayoría del prestigio que generó durante años.

Y es que Internet y las redes sociales han provocado que proliferen como setas los que hablan de fútbol, incluidos el que escribe, y que por tanto ya muy pocos sean los que van al quiosco de toda la vida a comprar el periódico para enterarse de las noticias de su equipo, cuando ahora en Internet se tiene donde elegir y totalmente gratis. Como consecuencia de esta enorme competencia parece que todo vale para captar algún comprador, esto también es extensible a todo tipo de periódicos y sino tan solo hay que irse a la primera portada de hoy que sacó El País para darse cuenta de lo poco que se contrastan las noticias actualmente.

Lo más doloroso es que esa pérdida de valores que tanto le achacan la mayoría de los periodistas deportivos al Real Madrid motivada por el fichaje de Mourinho, en mi opinión, otra crítica totalmente falsa, es la que ellos mismos están sufriendo y no son capaces de admitir. Todavía recuerdo cuando no hace tanto tiempo una portada del Marca significaba que eso era 100% verdad y nadie podía dudar ni por un momento de cualquier noticia que publicaban, todo eso ya lo han ido perdiendo poco a poco pero lo de hoy, como bien ha dicho Florentino, ha superado la línea roja de la ética que nunca se debe sobrepasar.

Lo siento por los grandes profesionales que tuvo, seguro que todavía tiene y que tendrá ese periódico, pero hoy ha perdido mucha credibilidad ante toda España y muy especialmente ante los madridistas, y dudo mucho que la restauren en poco tiempo, al menos, si no hacen un cambio radical en su forma de hacer periodismo..